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miércoles, 22 de junio de 2011

¿QUÉ ES SER PAREJA?

La pareja humana ha sido a través del tiempo un eterno misterio al que se le han dedicado muchos autores desde las más diversas disciplinas. En todas las áreas artísticas, son muchas las pinturas y esculturas que han intentando captar su esencia; así también, son miles los libros, prosas y poemas, que han tratado de poner en palabras las intensas emociones que genera la vida en pareja.

La pareja como sistema de organización social es la forma más habitual en nuestra sociedad, generalmente todas las personas buscan formar pareja en algún momento de su vida, probablemente por presión social, ya que nuestra mundo está organizado en base a las parejas y  por deseos conscientes e inconscientes producto de la estructuración de nuestro aparato psíquico desde nuestro nacimiento, en una cultura que considera la dinámica de pareja como base fundamental de la sociedad.
Se debe hacer le alcance que en este capítulo cuando se dice “pareja”, se hace referencia a toda dualidad de personas que deciden desarrollar un proyecto juntos, que se mantenga en el tiempo y que comparten un mismo lugar de convivencia, sin restringirlo solamente a quienes están legalmente constituidos, ya que la elevación de los índices de convivencia, de separación y de reconstitución de parejas, se deben considerar como evidencias de los cambios que la pareja está viviendo en los tiempos actuales.
Pero ¿qué se entiende por pareja?, existen diversas definiciones que intenta captar su complejidad. Encontramos  autores[1] que centran la definición de la pareja esencialmente en el espacio relacional que en ella se conforma, el cual se refiere al notorio  efecto del estilo comunicacional de la pareja, si este se caracteriza por el criticismo, probablemente tendrá un efecto devastador en los componentes de la pareja, cuya influencia se extenderá más allá de finalizada la pareja, o por el contrario, cuando la pareja se caracteriza por tener un estilo constructivo y acogedor, se constituirá como un espacio de nutrición emocional y crecimiento.
Las definiciones de otros autores[2] hacen referencia a las principales características funcionales de una pareja  dentro de las que podemos encontrar:
  1. Circularidad: Se refiere a que la pareja está recíprocamente regulada en forma circular, lo que significa que no se puede establecer alguna de las interacciones como la causa o efecto de la otra, sino que cada comportamiento es efecto de otro anterior y a la vez causa de un comportamiento siguiente.
Esto se puede observar claramente cuando las parejas intentan explicar cómo comenzó un conflicto, se observa que el comportamiento que uno de ellos connota como el causante, a su vez fue causado por otro comportamiento anterior del otro miembro de la pareja, el cual a su vez respondió a otro comportamiento del otro miembro y así sucesivamente
b. El todo es más que la suma de las partes: Esto se refiere esencialmente a las características propias de cada pareja como un sistema aparte, si bien cada componente trae mucho de los sistemas de los cuales proceden, que serían sus familias de origen, al unirse constituirán un sistema distinto a cualquier otro, esto se observa claramente cuando dos personas de una misma familia se casan con otras dos personas de otra misma familia, las parejas que se forman son totalmente distintas, a pesar que procedan de contextos tan similares.
c. La organización de cada pareja: Es la pauta de funcionamiento de cada pareja, es lo más parecido a su identidad como sistema funcional, dentro de la organización encontramos la forma como se negocian y establecen la jerarquía al interior de la pareja, la cohesión que la caracteriza y su adaptabilidad dentro de su funcionamiento.
     Una idea importante en esta organización es la negociación, ya que la forma de funcionamiento de toda pareja es consensuada, aunque a simple vista no lo parezca, para que cualquier pareja funcione como lo hace, ambas partes deben haber concordado en algún momento y deben poner de sí para que la organización se mantenga a través del tiempo.

d. Mitología de la pareja: Tiene que ver con aspectos cognitivos, que se refieren a la forma en que se piensan y explican las cosas al interior de la relación de pareja, también considera los aspectos emocionales relacionados en la forma en que se sienten los diversos acontecimientos de la relación y también considera aspectos del actuar, en el sentido que determinan el hacer     de la pareja en la vida cotidiana.
Más específicamente, la mitología de una pareja está compuesta por las creencias y valores que comparten, ya sea de tipo religioso y/o de diversos planteamientos valóricos, el clima emocional que caracteriza su cotidianeidad, que se refiere a que si discuten mucho o no, si son una pareja tendiente a compartir con otros o más bien solitaria, y que tiñe todo su funcionamiento y, finalmente, los rituales que comparten como parte de su convivencia, referidos esencialmente a la forma en que celebran momentos importantes o prácticas que tiene la pareja frente a ciertas situaciones y que hacen habitualmente.
Todos los elementos antes mencionados se deben tomar en cuenta cuando se realiza una terapia de parejas, ya que dependerá del hecho de considerar la multiplicidad de factores que interactúan y determinan una relación de pareja, tanto por parte del terapeuta como de sus miembros, que se logre el éxito de la terapia, y por lo tanto, la resolución y elaboración de los conflictos que aquejaba a la pareja.




[1] Biscotti, O. (2006). Terapia de pareja. Una mirada Sistémica. Lumen Grupo Editores. Buenos Aires, Argentina.

[2] Linares, J. L. y Campo, C. (2000). Tras la honorable fachada. Los trastornos depresivos desde una perspectiva relacional. Editorial Piados. Buenos Aires, Argentina.

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